Las cuevas del Drach, a las afueras de la pintoresca localidad portuaria de Porto Cristo, en la costa este de Mallorca, son uno de los destinos turísticos favoritos de la isla. Son unas de las cuevas de estalactitas y estalagmitas más grandes de Europa y fascinan con un mundo espectacular de formaciones rocosas surrealistas, estalactitas imponentes, colores impresionantes y uno de los mayores lagos subterráneos del mundo. El recorrido por estas cuevas de unos 1.200 metros de largo dura aproximadamente una hora. El plato fuerte de la visita es el paseo en barca por el lago Martel, acompañado por efectos de luz y un concierto en directo de música clásica.
Las cuevas del Drach, o «coves del Drach» en catalán, se formaron durante la época del Mioceno y ya eran conocidas en la Edad Media. Se trata de cuatro cuevas comunicadas entre sí: la cueva de los Franceses, la cueva de Luis Salvador, la cueva Blanca y la cueva Negra. La causante de este fascinante espectáculo natural es el agua, que se ha ido filtrando entre las rocas. En 1880, las cuevas fueron exploradas por M. F. Will y, en 1896, por E. A. Martel. Este último fue quien descubrió el lago, que más tarde recibiría su nombre. El concierto en el lago Martel se celebra desde 1935. Entre 1922 y 1935 las cuevas se acondicionaron para recibir visitas y se instaló un sistema de iluminación eléctrico.
La visita dura aproximadamente una hora, durante la cual los asistentes recorren 1.200 metros y descienden hasta casi 25 metros de profundidad. Justo en la entrada les espera uno de sus principales atractivos: la «bandera», una impresionante formación rocosa, que muestra varios colores debido a las filtraciones de minerales y que parece una bandera ondeando al viento. A continuación, se pasa por los «baños de Diana», unos lagos subterráneos de fascinantes aguas color azul turquesa que recuerdan a los mares del Sur. Después, se llega al «pequeño lago» y se atraviesa un sinfín de formaciones rocosas extraordinarias. Una de ellas recibe el nombre de «Monte Nevado», debido a que se asocia con un paisaje montañoso cubierto de nieve. La constante variación de colores en las cuevas del Drach y la ingeniosa iluminación crean una atmósfera especialmente sugestiva. En su interior, la temperatura es de 21 °C y la humedad relativa, del 80 %.
Sin duda, el momento culminante de la visita a las cuevas del Drach es el paseo en barca por el lago subterráneo Martel, el mayor lago subterráneo de Europa. Está amenizado por un concierto en directo de 10 minutos que, junto a los efectos luminosos que imitan el amanecer sobre el lago, ofrecen un espectáculo increíble para los sentidos. El concierto de música clásica corre a cargo de un cuarteto, compuesto por un chelo, un clave y dos violines. Aquellas personas que se mareen fácilmente en barca también puede cruzar el lago por un puente y disfrutar desde allí del concierto. La extraordinaria combinación de fenómenos naturales, música y luz hace que la visita a las cuevas del Drach sea una experiencia única para toda la familia, que dejará boquiabiertos especialmente a los más pequeños.
Para los niños, visitar las cuevas del Drach en Porto Cristo es una experiencia muy emocionante en Mallorca. El mito del dragón que vigila los tesoros dentro de la cueva convierte la visita en toda una aventura. Dado que hay que subir y bajar muchas escaleras, es mejor no llevar carrito a las cuevas.
El precio de la entrada para adultos y mayores de 13 años es de 16,00 euros, y de 9,00 euros para los niños de 2 a 12 años. Si se compran por internet, se obtiene un descuento de 1,00 euro y, al mismo tiempo, se puede reservar la hora deseada para la visita.
Junto a las cuevas del Drach hay aparcamientos gratuitos, jardines, tiendas de souvernirs y lugares para darse un baño, así como una zona de picnic, un bar, una parada de autobús y un cajero automático.
Durante la visita está permitido hacer fotos y vídeos, pero no durante el concierto. No se puede utilizar flash ni ningún otro tipo de iluminación. Para no bloquear el paso, no está permitido usar trípodes dentro de las cuevas del Drach.
Durante la temporada alta, las visitas a las 10:00, 16:00 y 17:00 horas no suelen estar tan concurridas.
Porto Cristo se encuentra a solo unos 500 metros de las cuevas. Desde la playa situada junto al puerto, se ofrecen paseos en barco por la costa este de Mallorca.
Desde Palma, la distancia es de unos 70 kilómetros y el trayecto se puede realizar tanto en coche como en autobús. En autobús se tarda cerca de una hora y media.
Dado que la visita a las cuevas del Drach de Mallorca dura aproximadamente una hora, esta excursión se puede aprovechar para ver otros destinos turísticos de la zona. Las cuevas del Drach se encuentran en la periferia de Porto Cristo, una encantadora e idílica localidad portuaria y pesquera. Con su pintoresco embarcadero, su puerto deportivo y sus callejuelas estrechas con edificios históricos, Porto Cristo invitar a pasear y descubrirlo sin prisas. Además, cuenta con una amplia oferta de restaurantes y tiendas. Sus aguas cristalinas y playas de ensueño, muy próximas a las cuevas del Drach, permiten relajarse al sol y practicar actividades acuáticas. También es posible bucear y realizar excursiones en barco con visión submarina en el Glass Bottom Boat. Toda esta región mallorquina se caracteriza por su ambiente relajado y es ideal para visitar en familia.